domingo, 15 de marzo de 2015
La posición de la mujer en la sociedad griega
La teoría más prematura de belleza puede ser encontrada con los trabajos filósofos griegos a partir del período presocrático. La escuela Pitagórica vio una fuerte conexión entre las matemáticas y la belleza. En particular, notaron que los objetos que poseen simetría son más llamativos. La arquitectura griega clásica está basada en esta vista de simetría y proporción. La investigación moderna también sugiere que las personas cuyos rasgos faciales son simétricos y poseen la proporción preferida son más atractivas que aquellas cuyos rasgos no los son.
El ideal estético del mundo clásico se fraguó en la antigua Grecia a partir sobre todo de la escultura. La belleza se concebía como el resultado de cálculos matemáticos, medidas proporciones y cuidado por la simetría. Es hasta cierto punto lógico que esto se diera así en Grecia, pues en ese contexto es donde nacen otras disciplinas como la filosofía entendida como conocimiento del mundo, de la ética y del hombre para ser más feliz.
En Grecia se entendía al cuerpo humano como el ideal de belleza en el que todas las partes deben guardar una proporción armónica entre ellas. Este canon de belleza establece que el cuerpo humano para ser perfecto debe medir siete veces la cabeza (Policleto S.V a.C.) En el siglo IV pasa de siete a ocho cabezas.
Estos cánones de Belleza se demuestran sobre todo a través de la escultura la cual sufre diferentes evoluciones a través de los tres periodos artísticos griegos (Arcaico, Clásico y Helenístico)
Las esculturas de las mujeres, aunque proporcionadas, representan a mujeres más bien robustas y sin sensualidad, los ojos eran grandes, la nariz afilada, boca y orejas ni grandes ni pequeñas, las mejillas y el mentón ovalados, pues daban un perfil triangular; el cabello ondulado detrás de la cabeza, y los senos pequeños y torneados.
Los matrimonios no eran fruto de una relación previa, o donde existía algún tipo de sentimiento amoroso, si no que era más bien una transacción masculina por medio de un contrato entre el padre de la novia y su futuro marido.
Sin embargo las mujeres que podían ser libres eran totalmente cuidadosas con su imagen física y se distinguían de las esclavas por llevar el cabello largo, el cual solían teñírselo de rubio y el uso de maquillaje, utilizaban perfumes, y las esclavas se encargaban de prestarles atención a sus uñas.
En la actualidad hay muchos de estos términos que aún se reflejan en algunos países, donde la mujer no tiene un valor importante en la toma de decisiones sociales, políticas y económicas. Pero estos pensamientos deberían de cambiar en la forma que todas las personas son iguales no importando sexo, color o raza; además hoy en día la mujer es capaz de realizar actividades que el hombre realiza, y sería muy injusto que se le tome como el sexo débil..
Deberíamos dejar aún lado el machismo, y enfocarse mejor en tratar de tener un término de igualdad y de justicia para todas las personas. Pues a mi parecer el hombre tiene temor a demostrar sus sentimientos, aunque no son todos, pero creo la mayoría sí teme a ser visto como débil por la sociedad machista. Sin embargo no se da cuenta que eso ayudaría a cambiar un poco nuestra cultura, nuestra forma de pensar y de como vemos las cosas.
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